Mr. Robot y cómo realizar la serie perfecta Nunca esperé que una serie de televisión tuviese todos los elementos que me agradan de la buena literatura: una excelente trama, personajes consistentes, escenas sólidas, una estructura planificada a un buen detalle para una historia que requería engañar al televidente, atraparlo en una ficción propia que propicia una reflexión sobre el individualismo, la sociedad tecnológica y de consumo y, por supuesto, las implicaciones en la salud mental en familias con poca capacidad para tratar una entropía o evento traumático definitivo. Los 11 episodios de Mr. Robot son impecables, refrescantes y fascinantes. La producción es de alto nivel, la fotografía y escenografía no se quedan atrás y gran parte de los actores logra un excelente desempeño, en especial su protagonista. Y las sorpresas, la alta tensión electrizante logran captar al televidente. En el capítulo tres se muestra una escena de sexo homosexual masculino, algo que no rec...